Es difícil arrancar el año con la necesidad de puntuar, pero la situación clasificatoria de Almagro y La Solana obliga a reaccionar sin más dilación. 

Los encajeros despidieron el 2018 con una derrota en Marchamalo, pero previamente habían vencido a Manchego y Atlético Tomelloso, tomando oxígeno en el fondo de la tabla. Y precisamente en otro derbi y frente al colista se las verá el cuadro encajero, ante un La Solana que, a pesar de su irregularidad, lograba un empate sin goles ante el Socuéllamos y quiere más.

Javier Bermúez, entrenador de los rojillos, sostiene que «este tipo de partidos son muy complicados de anticipar, pero será igualado». Los encajeros, que insisten en que «lo principal es sacar puntos, sea el rival que sea», se encontrarán con problemas en forma de bajas: Vílchez y Ramos están lesionados, por lo que sólo cuenta con quince efectivos en la primera plantilla. Entre las buenas noticias, Othmane regresa al grupo tras cumplir sus dos partidos de sanción. 

Una obligación para empezar el año - Foto: Rueda Villaverdelos visitantes. La Solana asume que se trata de un «derbi de necesidades», tal y como señala su míster, Carlos Gómez, que no esconde que «se trata de un rival directo; es un partido importante».

No obstante, el técnico albaceteño recuerda que todavía quedará la segunda vuelta de la temporada y por tanto el choque no será decisivo, así que «no creo que ninguno de los dos equipos nos vayamos a volver locos», así que anticipa un duelo muy disputado donde los dos contendientes tratarán de «equivocarse poco». 

Ganar supondría un «respaldo» al trabajo realizado, y más de cara al próximo duelo ante otro rival directo como es el Atlético Tomelloso, pero sobre todo significaría la primera victoria a domicilio de la escuadra amarilla.

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