Los impuestos de los ayuntamientos no dan para las nóminas

L.G.E.
-

Según la auditoría del Tribunal de Cuentas a entidades locales de la región, en 2016 la recaudación llegó en conjunto a 587 millones cuando el gasto en personal supone 658

Con los impuestos no da. El gasto que tienen que afrontar los ayuntamientos de la región para pagar a sus trabajadores supera lo que ingresan por impuestos. Es lo que revela la auditoría que ha hecho el Tribunal de Cuentas con datos de 2016 de un total de 705 entidades locales(entre las que también hay mancomunidades y diputaciones).  En conjunto recaudaron 541 millones de euros por impuestos directos y otros 46 por indirectos, lo que suma un total de 587 millones. Con ese dinero no sería suficiente para pagar las nóminas de todo un año, que suman 658 millones.

Las cuentas sí saldrían si se tiene en cuenta que a cierre de año había casi 90 millones de euros pendientes de cobro en la parte de impuestos. Además los ayuntamientos también recaudan un pico con las tasas. En 2016 consiguieron así 257 millones y además se quedaron pendientes de cobrar otros 38 por este concepto. Con esta cantidad ya sí que daría para pagar a los trabajadores de las entidades locales, pero este no es el único gasto. Solo en bienes corrientes y servicios se van 434 millones, con lo que las cuentas se volverían a descuadrar.

Al final la falta de recursos por un lado se compensa por otra partida de ingresos que se revela la más importante para las entidades locales: son las transferencias de fondos que se reciben de otras instituciones. En 2016 se percibió por esta vía un total de 648 millones de euros. En conjunto las 705 entidades locales que auditó el Tribunal de Cuentas manejaron un presupuesto global de 1.597 millones de euros en 2016. Esa cifra no llega ni al 20% del presupuesto que tuvo la Junta ese año y que llegó a los 8.420 millones.

840 millones de deuda.

Los ayuntamientos y diputaciones de la región arrojan también unos niveles de deuda que no son despreciables. A cierre de 2016 alcanzaba en su conjunto un total de 840 millones de euros y eso que faltaría por saber la deuda de aquellas entidades que no pasaron sus datos al Tribunal de Cuentas. Aunque parezca mucho, solo representa un 6% si se compara con la deuda que acumulaba por esa fecha la Junta y que ascendía a 14.055 millones de euros.

La mayor parte de la deuda que arrastran las entidades locales de la región la tienen a largo plazo. En ese cajón de pendientes tenían 686 millones a cierre de 2016. Acorto plazo, lo que siempre implicaba una mayor tensión de liquidez para afrontar vencimientos, tenían una deuda que rozaba los 155 millones de euros.

Cuenca y Hellín, los que más tardaban en pagar

Entre la veintena de ayuntamientos que más tardaban en pagar en 2016 hay dos de la región. En ambos casos pasan de los 100 días de retraso. Por un lado estaba el Ayuntamiento de Cuenca, que por esas fechas arrojaba una media de 114,49 días de período de pago. Peor dato tenía incluso Hellín, en la provincia de Albacete, con 120,23 días de media para pagar. Con todo, hay consistorios que hasta duplican esos retrasos. En 2016 lideraba la lista Algete, en Madrid, con 313 días de período medio de pago, le seguían Los Palacios y Villafranca de Sevilla con 272 y Parla, con 232.

Toledo, entre las diputaciones con más deuda del país

Entre los quince órganos supramunicipales que acumulaban más deuda en 2016 hay uno de la región. Se trata de la Diputación de Toledo, que está en el puesto trece, con una deuda acumulada a cierre de ese ejercicio de 63,5 millones de euros. Teniendo en cuenta que sus ingresos estaban en los 116, 86 millones, la deuda suponía un 54% de los mismos. Peor estaba la Diputación de Valencia, que en 2016 sumaba una deuda de 270 millones, la de Barcelona con 262, el Cabildo de Tenerife con 258 y el Área Metropolitana de Barcelona con 240.