Cuando Daniel Gómez se decidió hace 10 años por los estudios de Dirección y Gestión de Empresas no imaginaba el recorrido que tendría una vez que terminó la universidad y se puso a trabajar para una multinacional dedicada a automatismos.

Desde la primera entrevista que hizo, observó que en lo que más hincapié hacían los responsables de recursos humanos era en su conocimiento de idiomas que, para su currículum, no era ningún problema ya que contaba con el grado C2 en inglés, francés y alemán.

Aún no había cumplido seis meses y su cometido profesional ya era recorrer medio mundo, desde EEUU hasta China y La India, donde su compañía mantenía un importante plan de expansión con la apertura de ocho fábricas nuevas. El control de costes y el cumplimiento de los presupuestos fue lo que le hizo ascender hasta ocupar actualmente la dirección general de la empresa en China.

El caso de Jorge Arnaiz es muy similar, terminó económicas y desde que entró en una multinacional de neumáticos a los dos años ya estaba en Bruselas en control de costes. Un máster de especialización en EEUU le llevó luego a asumir mayores responsabilidades en Dubái.