El oleoducto reversible que conecta las refinerías de Puertollano y Cartagena (Murcia) ya está completamente operativo desde que a primeros de mes se pusiera en marcha en sentido hacia la costa tras concluir la fase de pruebas. Aunque aún no se ha utilizado para enviar productos a Cartagena, esta infraestructura permite que el Complejo Industrial de Repsol de Puertollano disponga de un puerto de mar desde donde distribuir sus productos.
Con esta puesta en marcha se completa un ambicioso proyecto que comenzó en el año 2000 con la puesta en marcha del primer oleoducto entre Cartagena y Puertollano que se utiliza sólo en dirección al interior de la Península para traer petróleo desde el puerto de esta ciudad murciana. Asimismo, hace año y medio entró en funcionamiento la primera fase del segundo oleoducto, de carácter reversible, que permite traer productos terminados desde Cartagena hasta Puertollano. Y ahora ¡se puede hacer esto mismo también en dirección a la cosa, culminando así una de las mejoras más importantes para aumentar la competitividad de la única refinería de interior en España que se ha hecho en los últimos años.
Este nuevo oleoducto reversible tiene un caudal medio de aproximadamente 450 metros cúbicos por hora y permite transportar 3,7 millones de metros cúbicos de producto anuales. Su recorrido, prácticamente idéntico al que trae crudo desde Cartagena, es de 357 kilómetros atravesando las provincias de Murcia, Albacete y Ciudad Real, y cuenta con tres estaciones de bombeo y 24 posiciones intermedias elevadas que permiten el control de la operación además de la carga.
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