El Atlético Tomelloso se encuentra totalmente inmerso en una aguda fase de transformación. El equipo auriverde, que acumula nueve partidos consecutivos sin conocer la victoria, sólo cuenta con 15 jugadores en la primera plantilla tras la salida de Lander, que ayer ponía rumbo a La Solana. De cara al duelo de este fin de semana frente al Almagro, Julián Espinosa sólo podrá echar mano de 13 efectivos, ya que De la Hoz y Moya se encuentran sancionados.

El técnico confiesa que tras la derrota sufrida en la jornada 14 ante el Calvo Sotelo Puertollano (0-1) «le dije al presidente que si la solución era buscar otro entrenador no iba a poner ningún impedimento», pero la respuesta no hizo referencia al banquillo sino a la plantilla: «Me dijo que la solución no era buscar un entrenador nuevo cada dos meses sino que era cuestión de los jugadores».

Así, en el Atlético Tomelloso se fijaba la mirada en la «falta de compromiso» de algunos efectivos, lo que obligaba a la directiva a buscar una transformación radical de la plantilla. Ahora, y a falta de concretar la última salida, el club busca «entre seis y siete jugadores», algo que «es complicado por la situación en la tabla que tenemos, hay que buscar oportunidades».

FUTURO. La compleja situación del Atlético Tomelloso se torna realmente incómoda. Espinosa reconoce que «hay que ser realistas, las sensaciones no son buenas, pero hay que seguir adelante». 

Y en el camino del Atlético Tomelloso se encuentra una oportunidad de redención justo este domingo en el Manuel Trujillo de Almagro, «un duelo muy directo, tanto en lo sentimental por los jugadores que han formado parte de nuestro equipo como por la situación en la tabla clasificatoria». Gascón y Ureña dejaban el Atlético Tomelloso para acabar firmando por el Almagro esta misma temporada, equipo que llega de ganar al Manchego y que cuenta con un punto menos que  los auriverdes en la zona de descenso.