La Conferencia Sectorial de Agricultura y Desarrollo Rural aprobó ayer el reparto de 71,5 millones de euros para continuar los programas de desarrollo rural de las distintas comunidades autónomas durante el primer trimestre de 2015. Por su parte Castilla La Mancha percibirá 10’4 millones de euros, posicionándose segunda en el ranking de regiones que mayor financiación reciben por parte del Gobierno Central.

María Luisa Soriano explicó al término de la reunión, que dicha cantidad «se irá incrementando a lo largo del año hasta alcanzar los 35 millones de euros». Y es que a pesar de que los programas corresponden al período comprendido entre 2007 y 2013, el plazo de ejecución finaliza el 31 de diciembre del presente año. De modo que será en próximas conferencias sectoriales cuando se proceda a la distribución de la cantidad restante.

Según los cálculos de la consejera castellano-manchega, se destinarán este ejercicio un total de 300 millones de euros al programa de desarrollo de la comunidad gracias a las aportaciones de la administración nacional, regional y los fondos europeos. Y en este sentido, manifestó que se trata de «una inversión importante» que permitirá crear empleo en los municipios que requieren de una mayor dinamización de la economía.  

En los dos últimos años, el dinero destinado a este fin ascendió a los 420 millones de euros. En este sentido Soriano recalcó que el Gobierno ha hecho un «esfuerzo especial» para agilizar el desarrollo del programa y «que no se pierda ni un sólo euro» de los fondos de la Unión Europea.

Desde la Consejería de Agricultura, han precisado que durante estos tres primeros meses del año principalmente se abonarán los expedientes relacionados con la incorporación de jóvenes al sector, las inversiones para las industrias y cooperativas agroalimentarias, además de la línea de prevención de incendios forestales. Asimismo se procederá a los pagos de las indemnizaciones compensatorias para aquellas explotaciones que están situadas en las zonas más desfavorecidas.

Por la tarde, la consejera de Agricultura asistió en la sede del Ministerio, a una reunión con el secretario general de Agricultura, Carlos Cabanas, y los consejeros del ramo, en la que abordaron la situación del sector lácteo.

Sobre este asunto, Soriano se mostró satisfecha por la futura liberalización del sector que arrancará en abril. «El fin de la cuota puede ser una oportunidad» aseguró, tras considerar que España es un país deficitario de leche, que ha de importar un tercio de lo que consume.

La eliminación del cupo puede abrir nuevas oportunidades al sector lácteo regional que «ha sabido trabajar» en los últimos años logrando dimensionarse y ser competitivo. El rendimiento de las explotaciones de la región se sitúa en 635 toneladas anuales, lo que supone el doble de la media nacional y el triple que la europea.  Además, durante la última campaña la calidad de la leche hizo que su precio fuese «ligeramente superior» que en el resto del país.