La paz en el planeta está en peligro y en un momento como la celebración del centenario del fin de la Primera Guerra Mundial, es necesario conocer cuáles son las amenazas. Así lo consideró ayer el presidente francés, Emmanuel Macron, durante el acto de conmemoración de la firma del armisticio, al que asistieron más de 70 jefes de Estado y de Gobierno, entre los que destacaron el estadounidense Donald Trump, el ruso Vladimir Putin o la alemana Angela Merkel, además del Rey Felipe VI y Pedro Sánchez por parte de la delegación española.

«Los viejos demonios resurgen, dispuestos a llevar a cabo su obra de caos y muerte», aseguró el galo, que llamó a los dirigentes internacionales reunidos en París a luchar por la paz «y por un mundo mejor».  

Macron habló de los riesgos que acechan al mundo actual como el calentamiento climático, la pobreza, el hambre y la desigualdad. El unilateralismo, la violencia y el dominio sobre los demás no solucionan esos problemas. «El patriotismo es exactamente lo contrario del nacionalismo», aseguró.

Sobre el conflicto que azotó, principalmente, al Viejo Continente, entre 1914 y 1918, subrayó: «En esos cuatro años, Europa casi se mata a sí misma». 

«A veces es como si la Historia recuperara su transcurso trágico para amenazar la paz», agregó el inquilino del Elíseo, que alertó del peligro de «nuevas ideologías» que influyen en las religiones. Además, abogó por la amistad franco alemana, la Unión Europea y las Naciones Unidas. «Viva la paz entre los pueblos y Estados», clamó. 

Durante el evento, Macron volvió a prender simbólicamente la llama al soldado desconocido que arde bajo el Arco del Triunfo. 

El acto fue el evento central de las conmemoraciones, que fueron seguidas por los líderes mundiales desde dos tribunas cubiertas con un techo de cristal para protegerlos de la lluvia que caía en París. Eso no evitó que los mandatarios, a excepción de Trump y Putin, caminaran por los Campos Elíseos para mostrar su unidad. 

Precisamente, la caravana de vehículos en la que el mandatario estadunidense se dirigía al acto fue interceptada por una mujer, que se abalanzó con el pecho desnudo, donde llevaba escrita la palabra fake (falso). Su intención era protestar por la política no pacífica del inquilino de la Casa Blanca. 

Ya por la tarde, en el Foro por la Paz, Merkel expresó su preocupación por el creciente nacionalismo «miope» que impera en el planeta. «La Primera Guerra Mundial nos mostró lo destructivo que puede ser el aislacionismo», destacó. «Si esto estuvo mal 100 años atrás, ¿cómo sería ahora?», agregó. 

Merkel indicó que actualmente se vuelve a actuar por intereses propios, lo que en el peor de los casos puede llevar a situaciones de violencia, en lo que pareció una crítica velada a Trump, ausente de la cita. 

Tampoco estuvo la británica Theresa May, quien conmemoró en Londres el centenario del fin de la Gran Guerra.