La provincia suma ocho ingresos por golpes de calor en este verano

Raquel Santamarta
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Cuatro personas trabajaban en el campo, tres estaban en su casa y uno había salido a correr

La provincia de Ciudad Real ha registrado en lo que va de verano un total de ocho ingresos en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) provocados por golpes de calor, según los datos facilitados a este periódico por el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam). Aunque sólo han trascendido dos casos en prensa, hasta la fecha se han declarado ocho: cuatro de los afectados se encontraban trabajando en el campo, tres estaban en su casa y uno había salido a correr. En este sentido, cabe recordar que un agricultor de 66 años, cooperativista de El Progreso, sufría el pasado 10 de julio un episodio de estas características mientras regaba unas viñas. Asimismo, el 17 de julio un hombre de 46 años se desvanecía mientras hacía deporte en la localidad de Puerto Lápice.

«Todos los pacientes, con edades comprendidas entre los 28 y 73 años, han sido dados de alta a excepción de dos de ellos, que se encuentran ingresados en el Hospital General Universitario de Ciudad Real (HGUCR) y La Mancha-Centro de Alcázar de San Juan», precisaron fuentes del Sescam incidiendo en que «éste último -el afectado de Puerto Lápice- recibirá el alta en las próximas horas tras pasar a planta».

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha activado la alerta amarilla (riesgo) para hoy y mañana. Las intensas temperaturas que está soportando la península este verano obliga a poner en marcha consejos prácticos. Entre ellos, evitar los ejercicios físicos prolongados en las horas centrales del día. Y si hay que pasar por ellas, mejor buscando la sombra botella de agua en la mano. El calor excesivo produce la pérdida de agua y de minerales. Y el problema llega cuando los grados corporales son superados por los registrados en el ambiente. Pero, además del conocido golpe de calor, hay que prestar atención a la deshidratación y combatirla con la ingesta de líquidos sin esperar a tener sed.

«Julio caliente, quema al más valiente», reza la sabiduría popular. Por eso, es importante ser precavido para evitar sus estragos. Beber mucha agua, protegerse de la acción directa del sol, evitar el esfuerzo físico en las horas centrales del día, así como las comidas copiosas, y vestir ropa clara y holgada son algunas de las recomendaciones oficiales.