Cerca de un millar de abogados revestidos con la toga, entre ellos los miembros de la junta de gobierno  del Colegio de Ciudad Real con el decano a la cabeza, protagonizaron ayer en Madrid una insólita protesta contra el proyecto de Ley de Justicia gratuita que propugna el ministro Alberto Ruiz-Gallardón convencidos de que esta reforma «se va cargar» un servicio público  ejemplar, aseguró en declaraciones a La Tribuna Cipriano Arteche tras calificar de «auténtico éxito» la convocatoria. El decano del Colegio de Abogados de Ciudad Real explicó que hay que tener en cuenta que sólo estaban convocados los decanos y las juntas de gobierno de los 83 colegios de España y los presidentes autonómicos del Consejo de la Abogacía, entre ellos el de Castilla-La Mancha, el ciudadrealeño José Luis Vallejo.

«No faltó nadie», subrayó tras señalar que en la comitiva que lideró también se encontraba la presidenta de los Jóvenes Abogados de Ciudad Real, María Rico.

Arteche reiteró que el Turno de Oficio está funcionando perfectamente y por tanto no entienden porque  hay que cambiar algo que funciona, en todo caso habría que mejorarlo. Al hilo de ello, recordó que la gratificación, «no se puede hablar de honorarios», que reciben los abogados de oficio «es irrisoria» sin merma de la calidad del servicio que prestan ni la especialización.

Para el decano de los abogados de Ciudad Real, lo más lacerante es que de aprobarse esta ley los ciudadanos no van a poder acogerse al beneficio de Justicia gratuita más de tres veces al año aunque por ejemplo sufran un accidente laboral, sean despedidos y tengan que reclamar unos honorarios. Además, cuando se termine la primera instancia, si quieren recurrir en apelación deberán mover de nuevo los papeles para acogerse a este servicio. A juicio de Arteche, también es «un disparate» que se pueda prestar el servicio en cualquier punto de España cuando la asistencia tiene que ser inmediata.

En los mismo términos se expresó el presidente del Consejo autonómico de la Abogacía, quien puso el acento en que el abogado de oficio tiene que estar adscrito a su colegio profesional para prestar un buen servicio al ciudadano.

El Turno de Oficio y la Justicia gratuita son una parte esencial del sistema constitucional del Estado de Derecho que hay que defender «frente a quienes pretenden perjudicarlo de cualquier forma», recalcó ayer el presidente del Consejo General de la Abogacía, Carlos Carnicer, que encabezó la protesta y leyó el manifiesto que suscribieron todos los decanos.

Más información en la edición impresa.