En un año en el que se conmemora el V centenario del nacimiento de Santa Teresa de Jesús, Daimiel se convierte en uno de los puntos de referencia de la vida de la beata que en 1599 fundaba el convento de las Carmelitas Descalzas en la localidad. Construyó dos más en la provincia, el de Ciudad Real, en el año 1596, y el de Malagón en 1568. Sobre esas construcciones, pero también sobre la vida servicial, solidaria y pegada a Dios que tuvo Teresa de Jesús se habló en la noche del pasado sábado en la Casa de Cultura, que acogió la multitudinaria inauguración de una doble exposición.
Al acto acudió la Madre Priora de la congregación de las Carmelitas Descalzas de Daimiel, el obispo de Ciudad Real, Antonio Algora, el alcalde de Daimiel, Leopoldo Sierra, y el Padre Manuel Martín de la Sierra, delegado del V centenario en Aragón-Valencia.
'Teresa de Jesús, enamorada de Dios' y 'Maestra de espirituales', que así se denominan estas dos muestras que han pasado por conventos de Valencia o Aragón y que se fusionan por primera vez en Daimiel, estará abierta al público hasta el 11 de enero en la Casa de Cultura. Un escenario poco habitual para una exposición de estas características religiosas, como indicó el obispo de Ciudad Real, Antonio Algora, que se congratuló de estar en un entorno no religioso porque eso, explicó, «pone de manifiesto la influencia que ha tenido la figura de Santa Teresa en toda la sociedad en general». Al mismo tiempo apuntó «ensalzar su figura significa decirle a la sociedad que la presencia de Dios en la vida de una persona la realiza plenamente».
Así, con el fin de ensalzar esa figura «solidaria, servicial, amable y justa», pero también dar a conocer «los escritos de su magisterio doctrinal en torno a la oración y la vida espiritual», tal y como detalló la Madre Priora de las Carmelitas Descalzas, la doble exposición recoge objetos teresianos de la época o fotografías de algunos de los 17 monasterios que la Santa fundó en diferentes ciudades españolas en sus últimos 20 años de vida.
Por su parte, el alcalde de Daimiel resaltó la importancia del municipio en la vida de Santa Teresa y también en la orden fundada por la misma. Una orden, aseguró, «integrada en una sociedad que actualmente necesita esos valores que proyectaba la Santa. Esa necesidad de reflexionar, buscar la paz interior para mejorar aquellas cosas que están en el día a día o ese respeto y voluntad para conseguir todos sus objetivos de forma entusiasta».
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