Un agradecimiento a 30 años de tradiciones con los pandorgos

HIlario L. Muñoz
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La Hermandad de Pandorgos ha recibido esta mañana la Medalla de la Corporación de Ciudad Real con la que culminan los actos del 30 aniversario desde su fundación y como modo de agradecer su labor en defensa de las tradiciones de la ciudad.

El acto ha contado con la presencia de todos los pandorgos y de la Corporación municipal y con una mirada especial a la solicitud realizada para que la Pandorga sea declarada fiesta de Interés Turístico Nacional y los hermanos que ayer no pudieron estar en este reconocimiento por haber fallecido. El presidente de la hermandad, Agustín Cantero, recordó a los ocho fundadores Tomás del Valle, Pablo Romero, Justo Serrano, Antonio Cárdenas, Benjamín Gómez, Emilio Arjona, Antonio Villaseñor y Julián Gutiérrez. Ellos en 1988 decidieron crear una organización en defensa de las tradiciones y de una Pandorga que se había refundado en 1980. "Los pandorgos somos un grupo de hombres manchegos, ciudadrealeños, que compartimos el amor por nuestra capital y la implicación en las fiestas y tradiciones de la ciudad", dijo Cantero, quien señaló que no se trata solo de celebrar los actos en honor a la Virgen del Prado, del 31 de julio, sino también la participación en fiestas de barrios, tradicionales o en educar a los más jóvenes.

"No hay vez que se llame a una asociación para colaborar en la que no estéis vosotros", dijo la alcaldesa de Ciudad Real, Pilar Zamora, encargada de entregarles la medalla, en un acto celebrado en el Salón de Plenos, desde el que apuntó a que la Pandorga mantiene "el objetivo de la declaración nacional" para el que cuenta con la hermandad como aliada en ese camino.