real Las ausencias del trabajo por enfermedades comunes supusieron un coste superior a los 748 millones de euros durante el pasado año en la provincia de Ciudad Real. Este es el dato que aporta la Asociación de Mutuas de Accidentes de Trabajo (AMAT) quien cuenta desde este año con una herramienta digital que permite calcular el coste económico del absentismo derivado de la Incapacidad Temporal por Contingencias Comunes (ITCC). El dato implica un incremento del 10,03 por ciento, según apuntó la entidad, respecto a los datos del pasado año.

El incremento del coste laboral en la provincia se debe, en opinión del presidente de la Federación Empresarial de Ciudad Real, Carlos Marín, a una pérdida del miedo por parte de los empleados a perder un contrato laboral fruto de la recuperación económica. «Cuando los datos de la economía van mejor, la gente pierde el miedo a perder al puesto de trabajo pero siempre con la confianza de que la falta sea por una enfermedad real, ya que cuesta mucho dinero a las empresas».

Los datos de AMAT apuntan, que durante el pasado año, hubo 26.652 procesos de Incapacidad Temporal por Contingencias Comunes, lo que implica un incremento del 7,87 por ciento respecto a la del año anterior. Mientras, las personas afiliadas, las que podrían padecer bajas o enfermedades comunes, aumentaron el pasado año un 2,89 por ciento, situándose en 143.843. Esto implica que de cada cien trabajadores, 1,42 tomaron una baja, con un incremento superior al once por ciento.

En términos económicos, estos 748.340.000 euros que AMAT argumenta que se perdieron en el año 2017 en economía provincial por el absentismo laboral se dividen en 62,22 millones de euros que son los gastos en prestaciones económicas, 44,64 millones de euros abonados directamente por la empresa; y 641,49 millones de euros que se entienden en términos de oportunidad, el dinero que se ha dejado de producir en esos empleos por la ausencia del personal empleado.

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