UPA cree que el mero anuncio de la destilación generó precios «de ruina»

Jorge Fraguas
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La organización agraria asegura que al ser mayores los gastos que los ingresos por la destilación de los cuatro millones de hectólitros se está vendiendo excedente a precio de saldo

La ‘marea naranja’ arrancó en la rotonda del Paseo de Recaredo con destino a la Consejería de Agricultura. - Foto: David Pérez

Varios centenares de viticultores de la provincia, la región y de la vecina comunidad de Extremadura se manifestaron ayer en Toledo, convocados por UPA, para criticar el decreto del Ministerio de Agricultura que propone la destilación de cuatro millones de hectolitros, «que vamos a tener que regalar». Así, el responsable regional de la organización agraria, Julián Morcillo, señalaba que a raíz del anuncio del decreto, el sector ha sufrido una «esquizofrenia» que está llevando a bodegas y cooperativas a vender sus excedentes a un «precio de ruina», un tercio del valor real de producción.

Aunque esto supone una gran preocupación para UPA, lo peor, quizás, está por llegar, según Morcillo, que teme que estos bajos precios actuales se trasladen a la próxima campaña, a punto de arrancar en algunas comarcas de Castilla-La Mancha. Por eso, desde la organización, la pasada jornada se apostaba por la destilación de crisis. «Creo que había una medida legal, recogida en un reglamento, como es la destilación de crisis, que contempla ayudas públicas por valor de hasta 53 millones de euros, compensando la renta de los viticultores, pero no se ha querido».

Respecto al anuncio del Ministerio de no aplicar la destilación propuesta en el decreto salido de la reunión del pasado 9 de julio hasta septiembre, de forma que se pueda ver de forma más real el excedente que queda de la última campaña, desde UPA estiman que efectivamente este puede ser menor de lo previsto, pero a base de vender a precio de saldo, con lo que el daño estaría hecho, sin olvidar que estos precios pueden ser determinantes para que de cara a la campaña que viene, los compradores pretendan seguir abasteciéndose a precios bajos. «Veremos si el 10 de septiembre queda vino y si alguien se está aprovechando de los precios de ruina que ahora tiene el sector», manifestó a este respecto.

Morcillo, que recordó que en Castilla-La Mancha son 70.000 familias las que viven del sector, con 38.000 puestos de trabajo fijo y nueve millones de jornales al año, criticó que la Consejería de Agricultura no se haya puesto del lado de los agricultores -otras organizaciones sí están a favor del decreto-, de ahí que «si esta consejera no ha sabido estar a la altura, es hora de que Cospedal se ponga al frente».

A la manifestación de ayer también acudía el máximo representante de la Unión de Pequeños Agricultores a nivel nacional, Lorenzo Ramos, que además de avalar lo dicho por Morcillo, aseguró no entender la postura del resto de organizaciones agrarias, «porque sabemos que la destilación es una medida perjudicial para el sector», aunque agregó que su sindicato sí está a favor de otras de las medidas que contempla el decreto.

Además de subrayar su apuesta por la destilación de crisis contemplada en la OCM, el secretario general conminó al Ministerio a trabajar, pero sin prisas, «con inteligencia y sabiendo que van a tener que poner fondos, porque esta situación sólo se puede solventar poniendo dinero ante esta circunstancia excepcional», no en vano, «lo que no puede ser es que se haya machacado el final de la campaña de este último año y ya se comience la próxima con unos precios que van a suponer pérdidas a los agricultores; por eso no podemos apoyar esta medida».