El acuerdo por la austeridad choca con el techo de gasto y el buzoneo

EFE
-

Las principales formaciones llegan a un consenso para reducir la cartelería electoral, aunque tienen sus diferencias en el reparto postal de papeletas y en fijar el tope de sus desembolsos

Los principales partidos llegaron ayer a un principio de acuerdo para reducir en lo posible la cartelería electoral en los comicios del 26-J, pero mantienen sus discrepancias a la hora de ahorrar en el reparto postal de las papeletas y en fijar un límite al gasto de cada uno de las candidaturas.El próximo miércoles intentarán acercar posturas y cerrar un pacto.

El PP está de acuerdo en reducir un 30 por ciento los gastos, sobre todo en publicidad exterior, pero no en recortar en los envíos electorales metiendo todas las papeletas en un solo sobre, como proponen otras formaciones, ya que entiende que sería ilegal. Para Génova, un buzoneo conjunto podría ser ilegal y, además, no supondría ahorro alguno. Además aboga, por ejemplo, por celebrar actos más austeros y evitar en lo posible los grandes mítines.

El PSOE coincide con el PP en su rechazo a modificar el sistema de reparto postal de las papeletas al considerar que «es un derecho de los ciudadanos», aunque ve margen para que el coste del mailing descienda. El portavoz socialista en el Senado, Óscar López, dudó de la legalidad de un envío conjunto, para al mismo tiempo recordar que hubo una experiencia similar en Cataluña, en la que, al final, se constató que era más caro un único envío de papeletas que por separado.

Aprovechó el vallisoletano para atacar al PP por sus presuntas financiaciones ilegales en los últimos comicios valencianos. 

Desde Podemos, el responsable del área de Finanzas y Transparencia, Segundo González, insistió en su propuesta de limitar el gasto electoral a tres millones de euros por partido, apostando por el buzoneo «mancomunado», que, según sus cálculos, supondría un ahorro de entre 25 y 30 millones de euros. 

Para el político morado, si el recorte se aplica de modo proporcional, «se castiga a aquellos grupos que hicieron bien las cosas y gastaron menos en diciembre, lo que no incentiva el ahorro».

Por su parte, Ciudadanos apeló a la «voluntad política» del resto de formaciones para solventar las dificultades técnicas que presenta el envío unificado de las papeletas. Así, apostó por una reducción del límite del gasto por partido.

Entretanto, los partidos más pequeños expresaron sus reticencias a la posibilidad de eliminar carteles y vallas publicitarias, alegando que no tienen «una presencia continuada» en los medios de comunicación y les restaría visibilidad de cara a la ciudadanía.

El portavoz del PNV en el Congreso, Aitor Esteban, afirmó que, aunque comprende que a los partidos mayoritarios «les pueda sobrar» la publicidad exterior, cree que es necesaria porque «no están en igualdad de condiciones».

De esta misma opinión es el portavoz parlamentario de Compromís, Joan Baldoví.

IU también es partidaria de que cada grupo recorte del presupuesto máximo establecido por ley, en lugar de hacerlo sobre lo que gastaron en la pasada campaña.