Graves daños estructurales fuerzan el desalojo del edificio de Sanidad

Pilar Muñoz
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Los informes técnicos llevan a la Junta a trasladar a casi 200 trabajadores a otras dependencias mientras se acometen las obras de consolidación del histórico edificio

Delegación de Bienestar Social de la Junta en Ciudad Real - Foto: /Fotos Rueda Villaverde

El edificio de la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales que se levanta en la esquina de las calles Postas y Bernardo Balbuena de Ciudad Real va a ser desalojado por graves daños estructurales, según se confirmó ayer a La Tribuna desde los Servicios Periféricos de la Consejería del ramo.

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI·F) y trabajadores fue más allá y habló de riesgo de hundimiento en base a la información que manejan.

En cualquier caso, los daños estructurales detectados en el inmueble han llevado a la Junta de Comunidades a tomar la decisión de desalojarlo y trasladar a todo su personal, cerca de 200 personas, a otras dependencias de la Administración regional en tanto se acometen las obras de consolidación del histórico edificio de principios de los años cincuenta.

El traslado se efectuará después de las fiestas navideñas, según apuntaron desde CSI·F.

Los primeros desperfectos en el edificio se observaron en 1993, cuando el Ayuntamiento de Ciudad Real emitió un primer informe advirtiendo de los mismos y el Gobierno de Castilla-La Mancha procedió a subsanarlos.

El año pasado se volvieron a detectar problemas en la estructura que motivaron el desalojo de las dependencias de la planta superior y el traslado de todo el personal que la ocupaba a la planta baja. Se pidió un estudio más completo y se procedió a «poner unos puntales» de contención.

Sin embargo, el pasado febrero hubo que volver a «desalojar otros despachos de la segunda planta y reubicarlos en la primera», explicaron desde la central sindical.

Unos meses más tarde, concretamente en agosto, se constató que estas deficiencias iban a más, se volvió a hacer un estudio y el nuevo dictamen técnico planteaba la necesidad de realizar obras de consolidación que no se pueden llevar a cabo en un inmueble abierto al público, decisión que se comunicó hace un par de semanas a los representantes de los trabajadores. La última reunión tuvo lugar el pasado día 13.

Desde los Servicios Periféricos de la Consejería de Sanidad se indicó que las obras van a consistir fundamentalmente en «reforzar la estructura de hormigón del edificio», que se ha resentido por el «peso» que soporta desde hace unos años al albergar más departamentos de la Administración y, por tanto, más personal y mayor archivo. El edificio de Sanidad «fue concebido para otro uso», explican las fuentes de la Administración tras señalar a modo de ejemplo que la planta tercera estaba destinada a vivienda del delegado y ordenanza.

Sin entorpecer su función. En un principio, según CSI·F, se barajó desalojar el edificio de forma inminente habida cuenta de la situación en la que se encuentra, pero la medida se ha aplazado hasta después de las fiestas navideñas con el fin de dar más tiempo al personal para preparar el traslado sin entorpecer el trabajo diario.

Además, se da la circunstancia de que en esta época del año hay menos personal trabajando por los días de vacaciones que han dejado para disfrutarlos en Navidad y los de asuntos propios.

En el inmueble trabajan unos 200 funcionarios y personal laboral de los Servicios Periféricos de la Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales.

«Todos están muy asustados y preocupados por la situación en la que se encuentra el edificio», remarcaron desde CSI·F tras explicar que llevaron el asunto a la mesa de salud laboral y el secretario «nos aseguró que no había riesgo para los trabajadores porque se habían adoptado medidas para garantizar la seguridad» mientras se busca un emplazamiento provisional y se procede al traslado para acometer las obras de rehabilitación del edificio.

Con sello de protección. El inmueble de Sanidad en la confluencia de las calles Postas y Bernardo Balbuena está incluido en el catálogo de edificios protegidos «para su mejor conservación», según recoge el vigente Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) del Ayuntamiento de Ciudad Real atendiendo a «su valor monumental, histórico, paisajístico o ambiental».

En virtud de esta protección, el PGOU especifica que en el inmueble «podrán realizarse obras de restauración, conservación y consolidación y rehabilitación tendentes al mantenimiento del edificio o a su adecuación a nuevos usos compatibles con la estructura arquitectónica a mantener».

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