La Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, a través de la Dirección General de Calidad e Impacto Ambiental, ha otorgado a la empresa Minas de Almadén y Arrayanes S. A (Mayasa), los dos permisos que le faltaban para instalar en Almadén una Planta de Estabilización de Mercurio. Se trata de la autorización Ambiental Integrada y la Declaración de Impacto Ambiental, los dos últimos trámites administrativos que quedaban para poder poner en marcha este proyecto, que se prevé que empiece a funcionar a finales del próximo año 2016.
El presidente de Mayasa, Fernando Murillo, mostró su satisfacción por el hecho de que la Junta de Comunidades haya dado luz verde a dichos trámites ambientales, ya que supondrán el pistoletazo de salida a una iniciativa por la que se viene luchando desde los últimos tres años, cuando en 2012 se trataba únicamente de una idea plasmada en papel. Documentos que demuestran que lo que era tan solo un proyecto se convertirá en un plazo de doces meses en realidad.
Tras recibir el visto bueno medioambiental, la empresa licitará el estudio técnico y de ingeniería de la planta de mercurio por algo más de 100.000 euros con el objetivo de conocer con detalle algunos aspectos imprescindibles para su puesta en marcha como las características mínimas exigibles para los servicios de ingeniería de detalle y asistencia técnica. Un paso previo a la elaboración del presupuesto de las obras, incluido el equipamiento, y a su posterior adjudicación.
La planta de estabilización de mercurio se levantará en el paraje conocido como Las Cuevas, a diez kilómetros del casco urbano de Almadén, en la CM-415, donde está ubicado el antiguo almacén comercial para exportación del mercurio y que será adaptado para la futura planta, por lo que la obra civil se ejecutará en «poco tiempo» al contar «con la infraestructura medio hecha», por lo que lo «más importante es la tecnología y el equipamiento».
Asimismo, el presidente de Mayasa recordó que tras el fracaso en la búsqueda de financiación para llevar a cabo la planta de estabilización de mercurio, señaló que será la propia empresa quien sufragará el proyecto, cuya inversión, según los primeros cálculos, se prevé que oscile entre el millón y medio y los dos millones de euros necesarios para poner operativa la futura planta, por lo que el esfuerzo «será aún mayor».