El número de asegurados de decesos se incrementó en la provincia de Ciudad Real en un 1,04 por ciento, según los datos de la Asociación Empresarial del Seguro (Unespa), que informa que había 300.695 asegurados de decesos a fecha de 31 de diciembre de 2013, frente a los 297.606 de un año antes.

Informaron que el seguro juega un papel protagonista en los sepelios en España y que en 2013, el sector se hizo cargo del entierro de 231.280 personas. Es decir, el 57% de los fallecidos en el país el pasado año. Esta es una de las conclusiones que se desprenden de la última edición de la Memoria Social del Seguro elaborada por Unespa.

La inmensa mayoría de las inhumaciones (159.118) se produjeron en la misma localidad donde ocurrió el fallecimiento. En 71.805 casos fue preciso trasladar el cadáver de una población a otra dentro del territorio nacional. Asimismo, hubo 357 personas que fallecieron en el extranjero y cuyos cuerpos fueron repatriados.

El seguro de decesos es, tras el de automóviles, el ramo con mayor capilaridad en España. No en vano, 20,5 millones de personas de los 46,5 millones de residentes en el país están protegidas por una de estas pólizas de carácter familiar, de acuerdo con datos recabados por ICEA. Un 44% de la población. Su implantación es particularmente destacada en Extremadura, donde el 65,6% de la gente se encuentra cubierta. Le siguen por relevancia Asturias (62,5%) y Andalucía (58,9%). Pero incluso en las regiones donde el seguro de decesos tiene un peso comparativamente bajo, su presencia sigue siendo perceptible. Es el caso de La Rioja (27,3%), Navarra (21,7%) y Baleares (21,2%). En el caso de Castilla-La Mancha, el número de asegurados se sepelio se cifra en 980.065. Otra característica llamativa del producto es su estabilidad. La relación entre un asegurado y su compañía de decesos suele ser muy dilatada.