Hasta la pasada semana no llegó el esperado calor a la provincia de Ciudad Real y se podría decir que hasta que el termómetro no subió a los 40 grados no comenzó realmente el verano para quienes buscan cambiar su armario. El mercurio subió junto con la llegada de agosto y eso implica que llegó acompañados de las rebajas en el comercio, del inicio del cambio de temporada y en la época del año en que Ciudad Real se vacía, sin estudiantes que realicen exámenes, con la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) cerrada administrativamente y con muchos funcionarios y sus familias fuera por vacaciones. Pese a todo, desde el mundo del comercio señalan que se puede considerar que la temporada está siendo similar a la del año pasado, aunque advierten que no termina de arrancar.
De este modo, lo explicó el responsable del comercio local en la Federación Empresarial de Ciudad Real (Fecir), León J. García, quien apuntó que la temporada estival «empezó bien» pero «con el inicio de las vacaciones ha flojeado».
García expuso que se está pensando ya en la próxima campaña porque «la temporada de verano no terminaba de arrancar y ahora el verano ha venido y fuerte». En este sentido, desde la organización de comercio argumentaron que es «el tiempo el que nos dicta el tema de las ventas» pero actualmente «las temporadas se alargan igual que lo hará el verano», lo que implica que la época de prendas estivales en los comercios continuará.García recordó que «las rebajas las tiene ya puestas todo el comercio» y pese a la liberación de estos periodos sigue habiendo gente fiel a ciertas fechas para iniciar los descuentos. Desde Fecir apuntaron que «hay buenas expectativas» con la esperanza de que se den «bien en general», aunque, con estos condicionantes, se considera que la campaña está prácticamente «igual» a la del año pasado.
En este sentido, Chema Ruiz, encargado de la tienda Gass, expuso que «las rebajas están en la misma línea y si cabe algo peor que el año pasado». La liberación tiene parte de culpa, ya que al existir «siempre ofertas» ya no es como antes «que se oía que llegaban las rebajas y había colas en las grandes superficies». «Ahora la gente sale y si ve algo, lo compra y como mucho se lleva alguna cosa que en época normal no se llevaría, dijo. «El verano lo vemos como siempre, nosotros no somos agricultores pero vivimos del tiempo igual que ellos. Si llega tarde, el género de verano lo tenemos colgado y lo estamos empezando a mover ahora, hay que venderlo con descuento y con la pérdida de margen que se tiene, porque nosotros pagarlo, sí lo hemos pagado a su precio».
Estas rebajas son las primeras que llegan con el cobro de bolsas en los comercios, una medida que «la gente ha recibido muy bien», aunque se esperaba que fueran más «reacia» , expuso García. En este sentido, recordó que la intención es mejorar el medio ambiente y que los clientes entienden que se trata de una normativa europea, no una decisión de los comerciantes.