El mapa del juego en la provincia de Ciudad Real ha cambiado mucho en los últimos cinco años. Como si de una pequeña colonización se tratase, los establecimientos de juego, casinos y locales de apuestas han ido poniendo chinchetas sobre la geografía ciudadrealeña, y de los 15 que existían hace apenas un lustro se ha pasado a los 61 que tienen licencia en vigor en la actualidad, cifra al cierre de 2018. Antes estas salas de juego se restringían a las localidades más pobladas, pero ahora hay incluso municipios con menos de 5.000 habitantes que cuentan con uno de estos establecimientos en sus calles, aunque sigue siendo la capital de la provincia, Ciudad Real, la que tiene un mayor número de estos establecimientos, hasta ocho.

La comarca de La Mancha y la zona del Campo de Montiel, junto con el Campo de Calatrava, son los lugares en los que más se ha extendido la presencia de los locales de juego. Por el momento, y con alguna excepción, su expansión parece seguir el patrón de instalarse en aquellas localidades mayores de 5.000 habitantes y sólo una, Calzada de Calatrava, tiene un local de juego o apuestas con menos de esta frontera de población. Aun así, la ratio más baja entre el número de locales que hay instalados en sus calles y el número de vecinos que tiene la posee Almadén, que cuenta con dos locales de juego para los poco más de 5.500 habitantes que tiene, o lo que es lo mismo, una ‘densidad’ de una sala de juego por cada 2.700 habitantes. El siguiente es Calzada de Calatrava, con 3.900 habitantes y una única sala de juego, y el resto de ratios, salvo el de Almagro, que cuenta con dos salas de juego para sus 8.900 habitantes, queda por encima de las 5.000 personas.

Eso, en cuanto a la relación entre el número de habitantes y las casas de apuestas y locales de juego. Si el listado se organiza respecto al número de locales que hay en cada población, las más habitadas son las que cuentan con una mayor oferta en establecimientos de juego. La que más tiene registrados y con licencia de actividad en vigor es Ciudad Real, con ocho locales de juego, y por detrás aparecen Puertollano y Tomelloso, con siete locales cada uno. Valdepeñas cuenta con cinco establecimientos de apuestas y casino y Alcázar de San Juan tiene cuatro. Con tres están Daimiel y La Solana, dos tienen Almadén, Almagro, Bolaños de Calatrava, Herencia, Manzanares, Miguelturra y Villarrubia de los Ojos y el resto de localidades tienen una sala de juegos cada una: Almodóvar del Campo, Argamasilla de Alba, Calzada de Calatrava, Campo de Criptana, Malagón, Membrilla, Moral de Calatrava, Pedro Muñoz, Socuéllamos y Villanueva de los Infantes; según los datos ofrecidos a La Tribuna por parte de la Consejería de Hacienda, de la que depende la Dirección General de Tributos y Ordenación del Juego.

el juego ‘online’. Además de la opción presencial de juego, existe el juego online. A diferencia de las apuestas y juegos presenciales, las apuestas a través de internet y su regulación son competencia directa del Estado, que elabora año a año un perfil del jugador online desde la Dirección General de Ordenación del Juego. El último perfil elaborado corresponde al último informe cerrado, el de 2017, ya que los datos de 2018, que en materia presencial elevan las propias comunidades autónomas al organismo estatal, están aún en fase de recopilación y análisis.

Por ese motivo, el perfil que se establece es estatal. Y ese perfil dicta que el 85 por ciento de los jugadores únicos (cerca de 1,4 millones en todo el país) son hombres, y que ocho de cada diez usuarios activos en los sitios de apuestas por internet tiene una edad comprendida entre 18 y 45 años. La media de usuarios activos por mes supera el medio millón de personas, y el tiempo medio de actividad es de 4,51 meses al año. Eso sí, uno de cada tres usuarios que se dan de alta mantienen la actividad durante menos de un mes.

Las apuestas es el segmento en el que participa el mayor número de personas (más de un millón) aunque el bingo es el segmento que experimentó un mayor crecimiento en el año 2017. La mayoría de los usuarios, un 68 por ciento, juega sólo a un segmento: 53 por ciento a las apuestas, 2 por ciento al bingo, un 5 por ciento al casino y un 8 por ciento al póker. El gasto medio por usuario es de 384 euros al año, 32 al mes.