Entre 500 y 800 aves mueren electrocutadas cada año

Ana Pobes
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La plataforma SOS Tendidos Eléctricos, que nació en 2017 y agrupa a nueve entidades, alerta de una de las grandes amenazas para la biodiversidad española

Entre 500 y 800 aves mueren electrocutadas cada año

Las torretas de alta tensión siguen cobrándose la vida de «numerosas» aves, la mayoría de especies protegidas como el águila imperial y el  milano real, entre otras. Algunas colisionan con sus cables, poco visibles, y caen; otras directamente se electrocutan al rozarlos o al posarse para anidar.

La plataforma SOS Tendidos Eléctricos, que nació 2017 y agrupa a nueve entidades relacionadas con la conservación de la naturaleza, entre ellas WWF y Seo Bird/Life, cifra entre 500 y 800 las aves que cada año mueren electrocutadas en la provincia ante la carencia o falta de aislamiento de los conductores eléctricos. Ante esta situación, una de las reivindicaciones de la plataforma es cambiar los postes conflictivos y ponerlos nuevos con parámetros antielectrocución, medida, reconoce, que supone un «elevado» coste e «inviable a gran escala», por lo que apuestan por «forrar los cables con plástico y por encima de metro y medio», iniciativa puntualiza, que supone unos 2.000 euros por tendido a las compañías eléctricas.

Francisco Javier Pulpillo es secretario de la Sociedad Ibérica para el Estudio y Conservación de los Ecosistemas (Siece) y uno de los integrantes de la plataforma. En declaraciones a La Tribuna aclara que los datos no son los aportados oficialmente por la Administración regional, y que se derivan de la recopilación a pie de campo por los miembros de la plataforma. Toledo es la provincia que lidera este ranking de mortandad, «con mayor número de casos detectados de relevancia». «No significa que en Toledo mueran más aves que en Ciudad Real, sino que se detectan muchos más», argumenta Pulpillo al tiempo que lamenta que «no hay efectivos de la Administración pública ni de asociaciones gubernamentales que revisen periódicamente los tendidos, por lo que no se detectan». Así por ejemplo, cuando en 2014 se registraron entre 38 y 40 ejemplares electrocutados en la provincia de Jaén, gracias al proyecto Pon un tendido en tu punto de mira, que «supone revisar de manera concienzuda aproximadamente el 60 por ciento de líneas eléctricas», se contabilizaron más de 800 aves.  

En Ciudad Real destaca la zona del Campo de Montiel, donde con «una población importante de águila imperial» se ha invertido «bastante» en aislamiento y «hasta hace poco ha sido referente». Frente a ella, otras zonas como la colindante a Toledo o del Campo de Calatrava como Almagro o Bolaños de Calatrava, entre otros municipios, con lugares «muy conflictivos» y que en muchos casos «se observan desde la carretera». Ahora, lamenta, en Castilla-La Mancha se trabaja «a golpe de electrocución» pero eso, «no es la solución», denuncia Pulpillo. La plataforma nació hace un año  con el fin de establecer un orden de prioridad para llevar a cabo el aislamiento en  aquellas líneas que se hayan detectado más conflictivas y alertar a la opinión pública y a las administraciones sobre la gravedad del problema de la electrocución.

 

2,3 millones de la Junta. El Gobierno regional ha trabajado toda la legislatura en la protección del medio ambiente y su fauna. Así, en noviembre del año pasado lanzó una convocatoria de ayudas por importe de 2,3 millones de euros para la mejora de los tendidos eléctricos de cara a evitar el problema de electrocución de avifauna, convocatoria que se encuentra abierta hasta mediados de febrero de este año. El objetivo,  que las compañías eléctricas adapten los tendidos eléctricos, modificando apoyos, asilando conductores o mejorando la señalización visual de los cables, para evitar estos casos y reducir así las muertes por electrocución.

Pero esta no es la única medida en favor de la recuperación y mantenimiento de la biodiversidad en la región, pues también se han realizado otras iniciativas exitosas como acuerdos con agricultores para retrasar las fechas de las cosechas y que no se vean afectadas las aves en periodo de nidificación,