La orden ITC/3860/2007 del Ministerio de Industria estableció que todo el parque de contadores de la luz español debería renovarse por equipos de telemedida inteligentes antes de 2019. Una medida que, según ha podido conocer este diario, ya se ha cumplido en Ciudad Real con la instalación de 46.000 equipos en la capital por parte de Unión Fenosa Distribución y que va por buen camino en el resto de la provincia, que cerró el pasado ejercicio con 100.000 equipos instalados y con la previsión de llegar a 145.000 antes de que termine 2014.
De este modo, se va cumpliendo con los tiempos para la implantación de un nuevo sistema que, según se apuntó desde la principal distribuidora en la región, va a suponer «importantes ventajas para los clientes». De hecho, una de las características de estos nuevos contadores de la luz es que las lecturas que proporcionan siempre son reales, por lo que no se realizarán estimaciones de consumo; además, ofrecerán al usuario información detallada sobre sus consumos, lo que le permitirá un uso más eficiente de la energía. Asimismo, los contadores inteligentes mejorarán el servicio a los clientes, ya que altas, bajas, reconexiones pueden ser realizadas a distancia y permitirán que la distribuidora detecte y actúe con mayor rapidez cuando se producen incidencias en la red.
En cuanto a la instalación, que ha dejado en un corto espacio de tiempo el cambio de 46.000 en la capital, desde Unión Fenosa se indicó que el proceso del cambio de contador es «muy sencillo». En concreto, un operario autorizado por la compañía acudirá al domicilio del cliente para retirar los equipos antiguos e instalar los nuevos. Durante el proceso, el suministro eléctrico se interrumpirá de forma breve y el nuevo contador comenzará a funcionar de forma automática sin que el cliente tenga que realizar ninguna operación. También se avanzó que el usuario no tiene que realizar ningún pago a los instaladores.
datos reales. No obstante, una vez instalado el nuevo equipo de medida, durante un tiempo inicial se mantienen lecturas en local y en remoto, de manera que se asegura el correcto funcionamiento del equipo y la fiabilidad de la lectura que se realiza. De ahí en adelante, la lectura comenzará a hacerse de forma remota y siempre ofrecerá datos reales del consumo que se ha efectuado.
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