Harúspices, de Tomelloso fue el ganador del XXXV Concurso Regional de Murgas, Comparsasy Carrozas con su particular versión del cuento de Pinocho. Ellos se llevaron el premio especial, mientras que el primero, segundo y tercer premio, fueron para 'Burleta Medieval' de la peña El Burleta de Campo de Criptana; los 'Sueños de Bollywood' de Los Tunantes de Piedrabuena; y 'Las mil y una noches', de la Asociación de Amas de Casa Nuestra Señora del Carmen de Pozuelo de Calatrava.
Tras una mañana soleada, casi calurosa, la tarde llegó fría. Pero eso no impidió que los miguelturreños llenaran las calles para disfrutar del acto que cada año pone fin al Carnaval, la fiesta grande de la localidad. Arropados con mantas, apoyados en sillas, entre amigos y en familia, grandes y pequeños dejaron de ser máscaras, después de diez días de fiesta, para convertirse en los espectadores del XXXV Concurso Regional de Murgas, Comparsas y Carrozas, que ayer concentró una treintena de agrupaciones y 2.414 participantes.
La pasarela carnavalera propuesta sobre programa, prometía y no defraudó. Miguelturra era la última parada de muchas de estas peñas y, tal vez por eso, y a pesar del cansancio, pues muchas llegaban tras haber participado en el desfile de la capital, optaron por echar allí el resto de la magia, de las coreografías, del maquillaje y hasta de los disfraces. Echaron el resto.
La celebración, que se prolongó a lo largo de casi cinco horas, empezó pasadas las 16.30 horas, en las inmediaciones de Parquesol, toda una 'babel' de disfraces en la que a veces era difícil distinguir donde acababa una peña y empezaba otra. Parquesol fue la antesala del desfile, las bambalinas desde las que se gestionó este relato que fue tomando forma a medida que las agrupaciones comenzaban a bailar al ritmo que ponía la música, la que traían las peñas y las que las que aportaron de manera improvisadas las charangas.
De contar esta curiosa historia se encargaron los que más saben de cuentos y leyendas, la Peña de los Mayores de Miguelturra, que fue la encarga de abrir el desfile que cerró la peña El Cencerro de Daimiel, con su 'Fantasía Disney'. Y entre una y otra, 33 agrupaciones y 33 historias diferentes.
Algunas de ellas venían del otro lado de la frontera. De México, más concretamente, le llegaba la inspiración a la Asociación Cultural Peña Los Remaches, de Moral de Calatrava, que no dudó en recrear la cultura de este pueblo sobre la Parca, convertida en esta ocasión en una singular marioneta gigante, siempre dispuesta a bailar. Mientras que de la India más cinematográfica llegaban los 'Sueños de Bollywood' de la asociación de la peña Los Tunantes de Piedrabuena, que destacó tanto por el colorido de sus trajes como por la trabajada coreografía que realizaron a lo largo de todo el recorrido.
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