El fiscal y la acusación particular en el proceso contra un hombre acusado de abusar de menor durante más de nueve años consideran que han quedado probados los hechos en el juicio celebrado en la Audiencia de Ciudad Real, a puerta cerrada, y piden que se le imponga una pena de hasta 15 años de cárcel (el Ministerio Público solicita 10).   

Para el abogado Juan Hervás, que ejerce la acusación particular, ya es importante haber conseguido que se siente en el banquillo de los acusados aunque el Tribunal le permitiera en la primera sesión abandonar la sala tras aducir que se encontraba mal. Su abogado Ramón Alén asegura que se encuentra «en estado terminal» a causa de una grave enfermedad. El año pasado consiguió que se suspendiera la vista oral por motivos de salud.

Ayer compareció ante el Tribunal pero no quiso hacer uso del derecho a decir la última palabra en el juicio, ateniéndose a lo que su abogado ha alegado en su defensa. «Mantiene su inocencia», aseguró Ramón Alén, quien da poca credibilidad a la declaración del menor y muestra su extrañeza de que no denunciara los hechos hasta cuatro o cinco años después. «No hay testigos, nadie sospechó nada porque nada ha habido», aseveró el letrado tras invocar el principio In dubio pro reo o, lo que es lo mismo, en caso de duda a favor del reo.

Sin embargo, para el fiscal y el abogado de la acusación particular no hay dudas y el testimonio del menor es creíble como atestiguaron los psiquiatras y psicólogos forenses. Según las acusaciones se ha probado que el acusado J. D. S. Z., de 75 años, abusó del menor desde últimos de mayo de 2002, cuando el menor tenía seis años, hasta 2011, en Ciudad Real.

Juan Hervás, además de la pena privativa de libertad, pide una indemnización de 60.000 euros en concepto de daño moral y el fiscal 45.000.