El Viña Albali Valdepeñas afronta una semana decisiva en su lucha por la permanencia. Tras el varapalo sufrido frente al Barça (2-9), los de Leo Herrera han pasado página para centrarse en el choque crucial de este sábado frente a un rival directo como es el Segovia (18 horas. Pabellón Pedro Delgado) en el cierre de la primera vuelta de la Liga.

Pero antes, esta noche el equipo vinatero, tras disfrutar ayer de una jornada de descanso, deberá cumplir en Toledo frente al Talavera en la final del Trofeo Junta de Comunidades, inoportuna por su ubicación en el calendario e incómoda por los problemas físicos que afectan a muchos de los jugadores azulones antes de la cita realmente trascendente en tierras segovianas.

A las bajas de Terry y Mendiola se unió este domingo la de Thiago, que sufrió un tirón en el choque ante el Barça y que podría sufrir una lesión muscular.

De esta manera, y con todos los respetos hacia la competición, el técnico del conjunto vinatero echará mano de jugadores menos habituales y de jóvenes como Álex Naranjo o Juan Cózar, que pueden presumir ya de haber debutado en Primera División e, incluso en el caso de Naranjo, de haber marcado ante el Barça. 

«Las cosas vienen como vienen y no hay que lamentarse. Vamos a intentar ganar, como en todos los partidos y ése es nuestro objetivo. No hay mejor manera de preparar el choque con el Segovia que intentar ganar el Trofeo Junta ante un gran rival como el Talavera», aseguró Leo Herera, que recordó también «la capacidad de adaptación de este equipo, que se crece ante las adversidades».

El choque que disputan Valdepeñas y Talavera reeditará la final del año pasado, en la que los vinateros se adjudicaron el título tras ganar por 4-2. El Talavera, con viejos conocidos como Raúl Aceña en el banquillo y Caio Alves, ascendió la pasada campaña a Segunda y es séptimo en la categoría de plata.