El joven director Sergio Morcillo fue el ganador del premio al mejor cortometraje nacional de Hemoglozine por su obra Gotas, una película en la que una joven que padece misteriosos dolores descubre la relación que estos tienen con la muerte de sus padres dos años antes.

Morcillo recogió la placa que le acredita como ganador de la mano del concejal de Promoción Económica, Cultural y Turística, José Luis Herrera, en el transcurso de una gala que sirvió para reconocer a los vencedores de las otras tres categorías a concurso, así como a la obra elegida en el certamen DarkPhoto y para otorgar un premio ‘horrorífico’ especial al cineasta ciudadrealeño Miguel Ángel Carrión, por el conjunto de su trayectoria.

En la categoría de mejor corto internacional la ganadora fue la canadiense Jennifer Nicole Stang, por la su película The Whistler, quien remitió un vídeo con su mensaje de aceptación del premio, al igual que hizo el actor español Ramón Langa, a quien correspondió el premio a la mejor interpretación por su papel de Hubert Forrester en el cortometraje Minotauro.

Quien sí estuvo en la sala para alzar su premio fue Joan Ventura, que junto con su hermano Álex codirigió Matins de diumenge, considerada por el jurado como Mejor Peor cortometraje. El cineasta barcelonés recogió su placa celebrando la ambigüedad de la denominación del premio y como un estímulo para seguir trabajando a pesar de la falta de medios.

En el certamen fotográfico asociado al festival, la vencedora final fue Míriam Martínez, autora de la imagen titulada Slenderman.

Estos premios se entregaron en una gala que tuvo un arranque espectacular, en el que se rindió homenaje de nuevo a los 40 años transcurridos desde el estreno de la película Encuentros en la tercera fase, de Steven Spielberg. Varios integrantes de la Asociación de Recreación Histórica Batalla de Alarcos, ataviados con indumentaria de diferentes épocas, reprodujeron la famosa escena en la que varias personas vuelven a la Tierra absolutamente desorientadas después de haber sido abducidas por los extraterrestres durante años o siglos.

Pero tras ese comienzo, el ritmo de la gala lo marcó la actuación del dúo Belcorde que interpretó varias bandas sonoras de películas del género fantástico, desde la misma  película de Spielberg, hasta El Señor de los anillos, pasando por otros clásicos como Blade runner, Bitelchus, Poltergeist o Harry Potter, entre otras producciones significativas. Las melodías se acompañaron de la proyección de imágenes significativas de estas películas.

El contrapunto de Belcorde lo marcaba el periodista y director de documentales Conrado Escudero, que fue el conductor del acto y el encargado de señalar las entradas y salidas del escenario.

De esta forma, la gala pasó de un inició espectacular, con efectos especiales a base de luces y sonido a un discurrir marcado por la sobriedad de la música y punteado, sobre todo, por la emoción de los premios, pero con sólo seis trofeos que repartir, la ceremonia resultó hasta breve. De hecho, en poco más de una hora se había sustanciado el trámite, incluida la foto de familia final.