Mientras las compañías descansan, a la espera de que la noche traiga consigo las funciones teatrales, los técnicos del Festival -los hombres de negro- trabajan para que los escenarios de la muestra estén preparados para el espectáculo. La Tribuna publica mañana el reportaje de esta visita que muestra como el Festival sigue funcionando en silencio cuando el calor aprienta.