De acuerdo a las mismas fuentes, el supuesto terrorista llegó al barrio milanés de Sesto San Giovanni a bordo de un tren procedente de Francia y, tras verse en un control policial, sacó su pistola y abrió fuego contra los agentes, hiriendo a uno de ellos en la espalda. El otro agente respondió a los disparos del tunecino y lo mató