Un agente de la Policía Local denunciado por quebrantar presuntamente la orden de alejamiento respecto a su pareja niega los hechos y asegura que la ha cumplido "a rajatabla" tras declararse víctima de una "enemistad manifiesta" por parte de la pareja de la madre de su novia.

El acusado ha declarado ante el juez de Penal número 2 de Ciudad Real que no tenía constancia de que le estaban grabando en una supuesta conversación mantenida con el denunciante el 25 del pasado mes de agosto en el bar que regenta su novia y la hermana de ésta. En cualquier caso, no reconoce su voz en esa grabación y, en su descargo, ha dicho que el denunciante puede haber "manipulado, desvirtuado, distorsionado la voz y haber puesto cosas" porque "es un experto en informática". 

A preguntas de su abogado, el procesado ha declarado que el denunciante, pareja de la madre de su novia, le odia y "quiere minar la relación con mi pareja. Es una denuncia para perjudicar nuestra relación", ha reiterado. 

Se declara víctima de la familia de su novia - Foto: Rueda Villaverde

Su novia le ha exculpado. Antes de declarar el juez le ha informado de que la ley le permite no declarar, pero ella ha dicho que quería hacerlo y, en calidad de testigo, está obligada a decir verdad.

La mujer ha manifestado no recordar bien lo pasó el 25 del pasado mes de agosto, que según la denuncia interpuesta por la pareja de su madre se produjo un quebrantamiento de la orden de alejamiento. La supuesta víctima y testigo ha dicho que el procesado ha cumplido la orden de alejamiento y también ha negado haber dado el consentimiento para que la pareja de su madre realizara la citada grabación. 

El autor de la grabación ha mantenido la denuncia contra el encausado y ha relatado que el 25 del pasado agosto acudió al bar de las hijas de su pareja y al observar una situación extraña preguntó y la novia del acusado le dijo que éste estaba en el aseo del local. Cuando salió le recriminó que estuviera allí porque existía una orden de alejamiento y puso a grabar la conversación con el teléfono móvil. 

Se declara víctima de la familia de su novia - Foto: Rueda Villaverde

El abogado que ejerce la defensa del denunciado y que ha puesto en tela de juicio la grabación, le ha preguntado al testigo por qué no presentó la denuncia hasta el 4 de diciembre y por qué aportó la grabación en un pendrive. El denunciante y testigo ha asegurado que entregó el teléfono móvil a la Policía Nacional, negando haber aportado la grabación en un pendrive. Ha admitido que el denunciado no le cae bien porque "no trata bien a Pilar", la hija de su pareja. "La tiene anulada". En cuanto a la supuesta violencia de género y maltrato, el denunciante ha afirmado que él no ha sido testigo de que la haya pegado y maltratado, pero "lo sé por ella y por su hermana".

El fiscal considera acreditado que el procesado quebrantó la orden de alejamiento y a su juicio la grabación de los hechos ocurridos el pasado agosto en el citado bar "no tiene tacha". A pesar de la declaración exculpatoria de la novia del acusado (llevan más de cuatro años de relación), el fiscal sostiene que el testimonio del denunciante "es claro". De este modo, ha mantenido la petición de once meses de cárcel para el encausado.

La defensa solicita la absolución con todos los pronunciamientos favorables porque considera que la prueba aportada carece de garantías procesales. "El origen de la grabación es desconocido. Lo que hay en las actuaciones es un correo electrónico que sale del teléfono móvil del denunciante", alega el letrado del encausado tras sostener la tesis de que se ha manipulado la grabación, "es un audio reconstruido en una mesa de mezcla de sonidos, con golpes bruscos para poner y quitar. Esta viciado desde su origen", ha remarcado el abogado. 
En su alegato de defensa ha reiterado que "no hay garantías de que la grabación se corresponda con un hecho real. Hay una enemistad manifiesta del denunciante hacia el acusado" y un "ánimo espurio para complacer a su pareja", madre de la presunta víctima. 
El letrado sostiene que no existe prueba de cargo con la mínima garantía y por ello pide la absolución.