Un vídeo para explicar la correcta utilización de un contenedor de basura. Es la última iniciativa que ha desarrollado el Consorcio de Residuos Sólidos Urbanos (RSU) como reacción a la implantación a mediados de junio del sistema de carga lateral en algunas zonas de la capital y que se esta distribuyendo a través de las redes sociales del propio Consorcio y del Ayuntamiento de Ciudad Real. Esta especie de 'manual de instrucciones digital' no sólo llama la atención porque explica cómo se debe realizar correctamente una acción tan habitual como sencilla; la de tirar la bolsa de basura al contenedor, sino también porque llega tras no pocos cruces de declaraciones entre el equipo de Gobierno socialista en el Ayuntamiento de Ciudad Real y el Grupo Municipal Popular, que dice hacerse eco de las quejas de los vecinos sobre el nuevo sistema por los problemas de apertura del contenedor y por la basura que se acumula en el suelo tras su recogida por el camión. El vídeo explicativo de RSU sobre estos contenedores se centra en tres aspectos. El primero es que pide a los vecinos que no depositen las bolsas de basura fuera del contenedor, una práctica que «no sólo se produce en este tipo de contenedores», sino también en otros, principalmente de recogida selectiva de residuos, argumentan fuentes del Consorcio. El segundo es que no se depositen residuos fuera de la bolsa, ni tampoco otros elementos como restos de poda o escombros, cuestión que se regula a través de la ordenanza de recogida de residuos. El tercer aspecto es para explicarle a los vecinos que no deben tirar de la tapa trasera del contenedor de carga lateral, sino de una tapa delantera, que tiene un cierre automático. «La tapa trasera es de uso exclusivo para el camión de recogida, no la fuerces ni intentes depositar tus residuos a través de ella», detalla el vídeo. Para el Consorcio, el hecho de que algunos vecinos depositen la bolsa de la basura en el suelo y no la introduzcan en el contenedor se debe a una razón de «comodidad, no tiene nada que ver con el sistema, ya que la dejan fuera en un sitio y en otro», pues sucede en gran medida con los contenedores de reciclado amarillo que, al tener la apertura más estrecha, hace que muchos vecinos opten por dejar los residuos fuera, explican a modo de ejemplo. Para utilizar la tapa adecuada es necesario «leer la pegatina» que tienen cada uno de los 177 contenedores de carga lateral que se han instalado en la capital y que informan de su uso adecuado. «El esfuerzo que tienen que hacer es leer la pegatina», informaron las mismas fuentes de RSU, al tiempo que insistieron en las ventajas que ofrece este nuevo modelo de contenedores. Entre esas ventajas destacaron la mayor accesibilidad, al estar todas las bocas de introducción de la basura por debajo de 1,20 metros, por lo que es «la medida que recomienda la ONCE»; cuenta con un sistema de cierre automático, de manera que reduce la emisión de olores; tiene una mayor capacidad de almacenamiento, de 2.200 a 3.200 litros, frente a los de entre 800 y 1.000 del sistema anterior y, además, ofrece «mayor seguridad» a los operarios en la recogida al no requerir de peones para su carga y sólo del operario que conduce el camión. Por lo que respecta a la basura que se queda en el suelo tras la recogida, RSU puntualiza que hay «un equipo» de trabajo del Ayuntamiento y RSU que completa esta función, de manera que atribuyen las quejas de los vecinos a la falta de costumbre por este nuevo sistema, una quejas, dicen, que se registraron al inicio de su puesta en marcha y que ahora sólo parten de un determinado grupo político, en referencia al PP. El sistema está en ciudades como Madrid, Barcelona, Toledo o Albacete y en la provincia «en pueblos gestionados por Consermancha» y, por parte de RSU, en pueblos de la comarca de Montiel y en algunas zonas del exterior de la capital.