Diez años de respiro del olvido

H.L.
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El centro Alöis cumple en 2017 una década dedicada a los enfermos de Alzhéimer con uno de sus mejores años en lo económico

En julio de 2017, el Centro de Respiro Alöis de Ciudad Real cumplió 10 años. Se trata de una celebración que se sumará el próximo año a los 20 que cumplirá la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzhéimer de Ciudad Real (AFA). Por este motivo, esa década de un espacio único por su gestión y por su desarrollo ha quedado a la espera de que el año próximo se pueda celebrar por todo lo alto. Mientras, el espacio abre esta semana, ayer y hoy, sus puertas a quien lo quiera conocer dentro de las actividades por el Día Mundial del Alzhéimer. Inés Campillo, coordinadora del centro y responsable de la asociación en estos momentos hace de anfitriona para descubrir a los visitantes los talleres, la residencia, el comedor, la zona ajardinada y la multitud de espacios de trabajo para evitar que vayan a más las pérdidas de memoria. «Desde la necesidad que uno siente surgen las ideas», indicó Campillo, quien inició el proyecto cuando su madre, que padecía alzhéimer, estaba viva. «Lo ideamos y lo pensamos para cubrir las necesidades que los familiares teníamos en casa, para pasear a los pacientes, ducharlos y para contar con el apoyo de profesionales como gericultores médicos, fisioterapeutas, psicólogos...», comentó la coordinadora del centro. La intención es que exista «una atención socio sanitaria» específica para quienes padecen la enfermedad del olvido. A partir de aquí, desde 2007 se ha creado un espacio que sirve para el respiro familiar, para que haya una atención a los pacientes y que tengan el cuidado que necesitan. Este año, de hecho, el acento se ha puesto sobre los enfermos de alzhéimer en la celebración del Día Mundial, hoy 21 de septiembre y cuyo lema elegido por la confederación de asociaciones, Ceafa, es 'Sigo siendo yo'. «Se ha querido potenciar la figura del cuidador otros años pero esta vez es el enfermo el centro de la celebración, con sus emociones».un buen año. «Ahora tenemos un buen momento por suerte», comentó Campillo, respecto a la situación actual del centro. La coordinadora recuerda lo mal que lo han pasado en épocas anteriores. «Ahora la cosa está resurgiendo y tenemos un grupo de familias que vienen a informarse y tienen 23 de las 24 plazas de residencia ocupadas con cuatro familias que van a pedir información». Mientras, en el centro de día, la otra parte del trabajo en Alöis, hay 25 plazas cubiertas, «entre el centro de día de jornada completa, que vienen de las diez de la mañana y se van a las cinco, lo que implica desayunar, comer y el trabajo en las salas de terapia, acordes con el nivel cognitivo, y el centro de día en media jornada, que finaliza a la hora de comer». Con estas cifras, desde Alöis consideran que 2017 se puede entender como «el año de la recuperación», tras periodos de crisis económica y retrasos en el pago de los convenios que llevaron a lanzar la voz de alarma años atrás. «Sólo tenemos tres plazas públicas del servicio de estancias diurnas y queremos mantenernos así», expuso Campillo, para la que estos duros años que han pasado sirvieron para que la asociación se haga fuerte en la autogestión del centro, «con unas tarifas acordes con AFA para cubrir el servicio» y que no exista una dependencia económica de «un convenio potente, como pasó hace años», con otras administraciones. Desde la Asociación de Familiares y Afectados de Alzhéimer explican que mantienen todas las señas de identidad con las que se diseñó el proyecto del centro de respiro. Los talleres de memoria, las actividades de fisioterapia... y, además, en este 2017 se han ampliado con el proyecto de la Junta de Comunidades, el Servicios de Estimulación y Promoción de la Autonomía Personal (Sepap). «Se trata de una iniciativa para fomentar la autonomía y la independencia, con un máximo de 15 personas, y en el que trabaja un psicólogo, un terapeuta ocupacional y un fisioterapeuta». La intención es trabajar de cara a paralizar las pérdidas de memoria.