Este mes de septiembre será decisivo para la restauración de los relieves que rodean la peana de la estatua de Miguel de Cervantes, que será objeto de conversaciones entre los técnicos de las áreas de Urbanismo y Cultura. El concejal de la primera de estas secciones, Alberto Lillo, explicó que cuando se desmontó la estatua se descubrió que las placas estaban abiertas y con manchas de óxido.