En los ocho casos de secuestros virtuales registrados en menos de 48 horas en Manzanares los falsos secuestradores pedían entre dos y diez mil euros para liberar a la víctima. Al menos una mujer pagó una cantidad en la creencia de que habian secuestrado a un familiar. Los falsos raptores actûan a través del teléfono. Algunas llamadas se producen desde prisiones de Chile.