El objetivo es solucionar un problema histórico como es la mala evacuación de las aguas desde la Carretera de Ossa de Montiel y desde los Barrios del Pilar o el nuevo Tomelloso. Se trata de la mayor obra civil de agua y saneamiento en marcha en Castilla-La Mancha, según el Consistorio, de dos tuberías de 2.000 metros de longitud, una de ellas un colector de 1.000 milímetros de diámetro.