Los fuegos artificiales cerraron este domingo las fiestas patronales en honor a Jesús del Perdón de Manzanares. Atrás quedó un largo y completo fin de semana en el que el pueblo participó masivamente en los actos programados, como las verbenas, las migas y la paella popular. El alcalde, Julián Nieva, destacó la alta respuesta ciudadana y habló de estas fiestas como las más importantes del año en la localidad, por lo que abogó por seguir potenciándolas. Con una extraordinaria noche de domingo, en la línea del buen tiempo que ha marcado estos días a pesar de las previsiones adversas, las fiestas patronales concluyeron con un castillo de fuegos artificiales que dejó mucho mejor sabor de boca que el de la feria de julio. El público, como en la mayoría de actos, volvió a salir en gran número a los Paseos del Río para despedir unas fiestas que se reivindican «como las más importantes del año», según señaló el alcalde de Manzanares. Nieva se mostró «absolutamente satisfecho» porque el conjunto de los actos programados «para todos los públicos» tuvieron «un altísimo nivel de participación». «El pueblo de Manzanares siente estas fiestas como ninguna otra y está demostrándose que es la gran fiesta del año, la que hay que seguir potenciando con la colaboración imprescindible de todo el movimiento asociativo», declaró durante el transcurso de la paella popular para 1.500 personas que se celebró este domingo el recinto de Fercam.