Se trata de proyecciones a largo plazo, no previsiones, realizadas para analizar cómo los gases de efecto invernadero y la acción humana influirán en el tiempo hasta el año 2100 realizada en base a numerosos modelos matemáticos. Los datos muestran además una caída de las precipitaciones que podrían superar 65 litros por metro cuadrado menos cada año en la provincia de Ciudad Real