El Gobierno de Castilla-La Mancha destinará para estas actuaciones una cifra global de 1.230.091,44 euros para un total de 777 kilómetros entre las tres provincias. A Ciudad Real se dedicarán 330.121,23 euros para 121 kilómetros. El objeto de estas actuaciones es realizar el repintado de marcas viales en mal estado en las carreteras dependientes de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha en las provincias de Toledo, Cuenca y Ciudad Real. Estas labores se justifican por la necesidad de garantizar la seguridad vial en numerosas carreteras en estas provincias, ya que el deterioro que se produce en la pintura de las marcas viales por el transcurso del tiempo supone una disminución importante de la visibilidad de las líneas y demás marcas de la calzada, con el grave perjuicio que ocasiona a la seguridad vial.